Entrevista a Oriol Calvo Vergés, Gerente de la Asociación Española de Ciudades de la Cerámica (AECC)
ORIOL CALVO VERGÉS, GERENTE DE LA ASOCIACIÓN ESPAÑOLA DE CIUDADES DE LA CERÁMICA (AECC)
“CERAMIBA es un potente escaparate para jóvenes artistas o personas que están empezando por ser el único evento en España al que se invitan a delegaciones extranjeras”
¿En qué punto cree que se encuentra el arte de la cerámica en la actualidad? ¿Qué innovaciones observa que se darán lugar en un futuro próximo?
La cerámica siempre ha cumplido una función de servicio a la sociedad desde el Neolítico hasta ahora. En el momento que una cerámica que deje de ser útil para la sociedad, esta desaparece o se vuelve insignificante. Por eso, en mi opinión, la cerámica ha emprendido actualmente dos caminos: la cerámica utilitaria, con un gran mercado (platos, cuencos e incluso prótesis humanas o protectores aeroespaciales); y la cerámica artista, ya que numerosos artistas la utilizan como su soporte material para sus obras, como es el caso de Miquel Barceló.
En el futuro, es difícil saber cómo va a ser, pero cada vez contamos con una cerámica más tecnificada, con procedimientos más automatizados y parece que es hacia donde se encaminan las tendencias.
Además de fomentar el valor de la cerámica, ¿qué otros objetivos persiguen desde la AeCC?
La AeCC trabaja también en la preservación y estudio del patrimonio cerámico, tanto de las piezas de cerámica como de los que han sido talleres, hornos, barrios alfareros, etc. Otra labor esencial que desarrolla la asociación es fomentar el turismo relacionado con la cerámica, para lo que se están organizando unas rutas turísticas. En este sentido, desde la academia internacional de la que formamos parte, se han puesto en valor unos destinos cerámicos mundiales, entre los que se encuentran muchos de los talleres y recursos de nuestra asociación.
Este tipo de acciones están destinadas a impulsar el desarrollo económico de nuestras ciudades a partir de la cerámica, incrementando a su vez el número de talleres para que la industria y los trabajadores de ella crezcan.
Por último, otro de los valores que defendemos desde la asociación es que la cerámica es un material perdurable y reutilizable, además de completamente inocuo para la naturaleza. En el momento en que la cerámica deja de ser útil, no deja de ser tierra cocida, un material que no daña la tierra ni a ningún ser vivo.
¿Qué actividades o acciones realizan para la consecución de estos retos?
La actividad principal de la asociación es lograr que los profesionales de este sector trabajen en red, tanto a nivel nacional como internacional, un hecho muy importante ya que hace posible un intercambio de experiencias y permite conocer buenas prácticas que nos ayuden a mejorar. De esta forma, nacen proyectos comunes y podemos unir todas nuestras fuerzas para defender e impulsar este sector y profesión. De esta manera, aquellos municipios más pequeños que tienen menor capacidad para poner en marcha iniciativas, pueden unirse y formar parte de un proyecto común. Entre estas iniciativas se encuentra la organización de congresos y jornadas técnicas para intercambiar conocimientos, así como los premios nacionales de cerámica para reconocer la dedicación y trayectoria de personas que han dedicado su vida entera a la cerámica, como pueden ser artesanos, artistas o investigadores.
¿De qué forma ha afectado el COVID19 al correcto desarrollo de la asociación?
La pandemia del COVID19 nos ha afectado y mucho. De entrada, lógicamente hubo un parón de todas nuestras actividades al igual que para la sociedad: se pararon los congresos, se pararon los premios y todo se pospuso. A causa de todo esto, hemos fomentado que la cerámica, que era una actividad esencialmente presencial, se pueda realizar online y ahora promocionamos un formato mixto con el programa ¡Hola, Cerámica! Con respecto a cómo han afectado estos acontecimientos a nuestros artesanos y comerciantes, hemos sacado conclusiones de las experiencias que ellos mismos nos iban trasladando. Por un lado, el parón del turismo ha afectado gravemente al sector obligándolas a cerrar temporalmente, ya que el turista en muchos casos es el cliente principal de estas tiendas. Algunas sabemos que ya no han vuelto a abrir y otras ya se están recuperando al tiempo que se reactiva el sector turístico. El otro problema gravísimo fue que se dejaron de hacer ferias y esto perjudicó especialmente a los alfareros que comercian con la mayor parte de su producción en estos circuitos, que además se encontraban con que las tiendas estaban cerradas.
También ha sido para todos un tiempo de reflexión y para atender aquello para lo que no se encontraba hueco antes. En este sentido, muchos artesanos se han replanteado sus productos, su manera de trabajar y, en algunos casos, han aprovechado para mejorar su posicionamiento en las redes sociales y en internet optimizando su sitio web. Otros comienzan a estar presentes en el mundo digital obligados por las exigencias de la pandemia. Esperemos que poco a poco las cosas se vayan normalizando y nos vayamos recuperando.
Bailén es uno de los municipios asociados a la AeCC. ¿Cómo evaluaría el papel de la ciudad en este sector artístico?
Bailén es uno de los pilares básicos de la cerámica de este país, pero sin el prestigio y la trascendencia de otras localizaciones como Talavera de la Reina o Manises. Hay mucho que trabajar en esta dirección. Seguramente esto se deba a que Bailén se ha dedicado más a la alfarería de base donde la producción ha estado más enfocada a cubrir las necesidades de la construcción, de la jardinería y de distintos usos cotidianos en el hogar, que a elaborar piezas más artísticas o decorativas. Por supuesto pueden ser elaboraciones artísticas, aunque la finalidad principal no es ser una pieza estética, sino práctica y que resuelva necesidades del día a día.
Espero que poco a poco vayamos ganando prestigio a nivel internacional con las acciones que estamos fomentando. En este sentido es una falta a corregir el hecho de no contar con un centro de formación en la localidad. Me consta que el ayuntamiento está intentando remediarlo. Un espacio como ese nutriría al sector de profesionales más formados tanto técnicamente como a nivel artístico con los que contribuir a poner la cerámica y Bailén en el lugar que se merecen.
¿Qué consejos les daría a los artistas que presentan sus piezas en el V Concurso Internacional de Cerámica Artística Ciudad de Bailén?
Les diría que sean ellos mismos, pues precisamente por eso son artistas, para ser ellos los que sean creativos y, a través de un gran conocimiento de la materia, logren sacarle el máximo partido. Creo que sería bueno recomendarles que apliquen un lenguaje estético actual, es decir, que no intenten imitar el pasado porque para eso ya tenemos los objetos que están hechos. No necesitamos que en dos mil veintiuno sigamos produciendo lo mismo hace treinta o cincuenta años.
¿Considera que Ceramiba puede ser una ventana al mundo para jóvenes artistas o personas que están empezando en este sector?
Por supuesto, es un escaparate potente para jóvenes artistas o personas que están empezando en este sector ya que estamos ante el único evento en España, quitando ferias internacionales, al que se invitan a delegaciones extranjeras para que puedan conocer de primera mano la producción de cerámica que se está haciendo aquí. Es una labor por la que felicitar al Ayuntamiento de Bailén, que podría haberse limitado a hacer una feria para el público y decidió hacerla para profesionales, sobre todo, creando una plataforma para promover la cerámica y su producción utilitaria.